Concientización

 ¿Son tus gustos o solo quieres ser igual a los demás?

Vivimos en una era donde la información y los valores se transmiten principalmente a través de los medios digitales. La cultura de masas nos envuelve diariamente con imágenes y mensajes de vida que nos dicen qué debemos consumir, cómo debemos vernos y qué debemos desear. Esta cultura no nace de forma natural, sino que es diseñada por intereses económicos que priorizan la venta por encima del bienestar.

Como menciona Noam Chomsky (Es el descubridor de la jerarquía de Chomsky, una clasificación de lenguajes formales de gran importancia en teoría de la computación. También es conocido por su activismo político y por sus críticas a la política exterior de Estados Unidos y de otros países, como Israel), “ellos entendieron que era más sencillo crear consumidores que someter a esclavos”. Esta frase revela cómo en la era actual no se basa en la fuerza, sino en la manipulación emocional y cultural. Los influencers, figuras aparentemente independientes, son piezas clave en este sistema. Nos muestran estilos de vida ideales y, en muchos casos, inalcanzables, generando deseos que no nos pertenecen, pero que terminamos adoptando.

¿Qué son los influencers?

Los influencers son personas con una gran cantidad de seguidores en redes sociales que tienen la capacidad de influir en la opinión y decisiones de sus audiencias. En muchos casos, se presentan como “auténticos” o “reales”, pero en realidad funcionan como promotores del consumo masivo. Promueven productos, marcas, estilos de vida y creencias que muchas veces están alejadas de la realidad de quienes los siguen. Su función es clara: generar deseo, crear necesidad, impulsar ventas.

La trampa del consumo aspiracional

El consumo aspiracional se basa en la idea de que “vales más si tienes más”. Las redes sociales están llenas de personas mostrando sus viajes, ropa de marca, cuerpos perfectos y estilos de vida de lujo. Esto genera en el espectador la falsa idea de que, si compra lo mismo o vive igual, será más feliz o más valioso. Sin embargo, esto lleva a muchas personas a endeudarse, a sentirse frustradas, e incluso a vivir vidas que no pueden sostener, todo por encajar en una sociedad impuesta por la cultura de masas.

¿Qué pasa con la postverdad y las redes?

La postverdad es cuando importa más lo que sentimos que lo que es verdad. En redes, muchas veces los influencers no dicen si un producto funciona de verdad, solo lo muestran bonito o emocionante para que lo compres. Por ejemplo, dicen que una crema es “milagrosa”, pero no muestran pruebas reales. Lo que importa es que te haga sentir que la necesitas.

¿Y qué problemas causa esto?

Esto puede hacer que muchas personas se sientan mal con su cuerpo o su vida, porque se comparan con lo que ven en redes. A veces eso lleva a tener ansiedad, sentirse tristes o gastar dinero en cosas que no necesitan. En lugar de hacernos sentir bien, la cultura de masas nos hace sentir inseguros solo para que sigamos comprando.

Después de leer todo esto quisiéramos que respondieras un cuestionario para ver como la cultura de masas a afectado tu vida.

ENCUESTA